Ficha técnica
- Dirección: Peter Jackson
Intérpretes: Martin Freeman, Ian McKellen, Orlando Bloom
Producción: EE.UU, 2014.
Duración: 144 m. Fantástica
Ficha de la película
muybuena
una lluvia de flechas que es como una lluvia sangrienta -en la medida que lo permite una película para casi todos los públicos-... Y entre tanta batalla y tanta guerra, entre tanta épica, La batalla de los cinco ejércitos resulta, a su manera, la más libre y (¡Coltrane, perdóname!), la más jazzística de todas. A pesar de su coreografía milimetrada, como de tablero de ajedrez -se puede
imaginar uno a Peter Jackson
jugando a ser el general Patton- hay momentos en que parece que el
director se libera de la letra, de los estribillos marcados, de una
melodía conocida, de todo lo que ha sido la saga, y sigue su instinto.
Salpicando la historia de humor y también de ligero terror. El resultado es una película inesperada, a su manera. Más jugosa que las anteriores. Más juguetona. Más generosa también. Aunque el Hobbit (Martin Freeman) resulte un personaje desdibujado, como un secundario de su propia historia. Hay un triángulo amoroso entre la princesa Tauriel (Evangeline Lilly), el enano Kili (Aidan Turner) y el arquero Legolas/Orlando (Bloom), y algo de amorosa veneración por parte de Galadriel (Cate Blanchett) hacia
Gandalf (Ian McKellen), todavía gris. Hay orcos. gigantes, enanos enfurecidos y elfos eternos... ¡Dios mío, estoy hablando como un friqui! En fin, hay algo que matiza tanta batalla y tanta solemnidad, ya digo, y es la libertad de un director fluido y atento. No improvisa, pero juega. Que sabe contar. La adaptación de Tolkien llega por fin -dirán algunos- a su fin. Con esta
trilogía de El Hobbit que empezó más mal que bien. Con una primera entrega de una inocencia boba. Continuó,
en su segunda entrega, con momentos memorables, como los de la araña,
la huida por los vericuetos de la montaña y el juego de ingenio con el
dragón Smaug. Y concluye a lo grande. Con esta Batalla de los cinco ejércitos en la tierra de Tolkienland.